Cuando es
verano todos tienen calor pero yo no. Yo siempre tengo frío
Ahora estoy
congelada….prácticamente congelada. Nunca lo podría haber prevenido.
Vino de
golpe.
Resulta que
no me pude comprar un polar para cuando alguien me lastimara y se me viniera el
frío.. Pero mi lengua es maldita, dice cosas que no quiere decir, así que parte
de la culpa es mía. Por eso hace más frío todavía
Cuando me
siento a escribir pienso a quien le dedico lo que hago y trato de que entienda,
pero mis palabras son encriptadas y no sé escribir, expresarme del todo
bien…estoy harta del “todo bien”.
A veces me
vuelvo como una nena de 5 años que quiere su juguete. Hoy quería un llavero con
el signo de la paz (busco la paz donde no la tengo) y no paré hasta conseguirlo.
Lo cierto
es que la gente piensa que es fácil enamorarse y yo creo que es todo un
aprendizaje. Un proceso y un “saber respetar” un “estar ahí”. A mí nunca me
tocó la sortija cuando era chica pero hace unos días, el viernes pasado saqué
dos veces en la misma vuelta…loquísimo.
Así que
tenía dos sortijas, pero, para que quería dos si solo me importaba la que me
había ganado y no la que el sortijero me dejó agarrar a propósito. En la
próxima vuelta ya no saqué sortija y deseché la segunda. Me quedé con la
primera. Con la que me había ganado yo.
Con la que tenía real valor.
Ahora no
tengo tanto frío.
(Ah! A la
sotija que me gané le puse nombre: Pablo)