Creo adivinar,
suponer, sin bifurcada razón,
sin
lenguaje forzado que me lleve contra de la corriente;que las gotas de sudor frío se fueron con el desamparo
de otra madrugada siniestra, llena de astío y de penumbras.
¿quien es quien en una noche de sabores indiscriminados?
¿cuando las lenguas se pierden entre si?
¿cuando los cuerpos se entrelazan y se confunden en uno solo?
... las
piedras se mojan en lluvia ácida (como también mi corazón)......tratando de acompasar el silencio de dos "seres" que se encuentran a jugar a "ser"....
y dejan, así, impávida, intelectualmente, toda la marejada a su favor.
Nos encontramos frente al fracaso que nunca nos abandona.
Nunca.
Sor Juana.